Ahora sí que estamos seguros, ya no tenemos la menor duda de que ha llegado el verano. La prueba definitiva de que empieza la época de vacaciones es que La Vanguardia publicó ayer «una selección de la abundante oferta editorial disponible estos días».
En las próximas semanas irán apareciendo en los medios más y más recomendaciones. No tenemos mucha fe en sus bondades y aciertos, porque la mayoría coinciden sospechosamente con los últimos lanzamientos o los libros de moda, pero intentaremos ir recogiéndolas con objeto de crear nuestra propia lista de «re-re-re-recomendados mediáticos», la de aquellos libros que aparezcan en boca/pluma de todos. Cuanto menos, el resultado puede ser curioso.
De momento, a modo de aperitivo, avanzamos la «biblioteca de las vacaciones» que Xavi Ayén y Rosa M. Piñol han preparado para La Vanguardia:
Una lectora nada común, Alan Benett, Anagrama, 2008. Tradución de Jaime Zulaika.
Acción de gracias, Richard Ford, Anagrama, 2008. Traducción de Benito Gómez.
La maravillosa vida breve de Óscar Wao, Junot Díaz, Mondadori, 2008.
La casa de los encuentros, Martin Amis, Anagrama, 2008. Traducción de Jesús Zulaika.
El maestro de la inocencia, Tracy Chevalier, Lumen, 2008. Traducción de José Luis López Muñoz.
La isla, Giani Stuparich, Minúscula, 2008. Traducción de J. Á. González Sainz
Circo familiar, Danilo Kis, Acantilado, 2007. Traducción de Nevenka Vasiljevic
El pentateuco de Isaac, Angel Wagenstein, Libros del Asteroide, 2008. Traducción de Ángel Wagenstein
Lo que sé de los vampiros, Francisco Casavella, Destino (premio Nadal 2008).
El mundo, Juan José Millás, Planeta (Premio Planeta 2007).
Nocilla Dream, Agustín Fernández Mallo, Candaya, 2006.
Nocilla Experience, Agustín Fernández Mallo, Alfaguara, 2008.
Las benévolas, Jonathan Littell, RBA, 2007. Traducido por María Teresa Gallego Urrutia.
El lado oscuro del amor, Rafik Schami, Salamandra. Ni en la ficha de la editorial ni en el ISBN aparece el nombre del autor.
Un mundo sin fin, Ken Follet, Plaza & Janés, 2008. Traducido por Anuvela (equipo de traductores)
Juegos sagrados, Vikram Chandra, Mondadori, 2007. Traducido por Dora Sales Salvador
La emperatriz de la seda, José Frèches, MR, 2008. Traducido por Roser Berdagué Costa.
Los hombres que no amaban a las mujeres, Stieg Larsson, Destino, 2008. Traducido por Martin Lexell y Juan José Ortega Román.
El otro nombre de Laura, Benjamin Black, Alfaguara. Traducido por Miguel Martínez Lage.
El niño con el pijama a rayas, John Boyne, Salamandra, 2007. Traducción de Gemma Rovira Ortega.
El juego del ángel, Carlos Ruís Zafón, Planeta, 2008.
El asombroso viaje de Pomponio Flato, Eduardo Mendoza, Seix Barral, 2008.
Mil soles espléndidos, Khaled Hosseini, Salamandra, 2007. Traducido por Gema Moral Bartolomé.
Instrucciones para salvar el mundo, Rosa Montero, Alfaguara, 2008.
La elegancia del erizo, Muriel Barbery, Seix Barral, 2007. Traducido por Isabel González-Gallarza Granizo.
Increíble lo mucho que nos ha costado encontrar el nombre de los traductores de la mayoría de las novelas. En más de la mitad de los casos hemos tenido que recurrir al ISBN, porque las editoriales no los incluyen en la fichas técnicas que cuelgan en sus propias webs.
Honrosas excepciones: las editoriales Acantilado y Libros del Asteroide, que no sólo mencionan al autor en la ficha del ibro, sino que los tratan como se merece, dándoles un espacio web propio para su biografía y traducciones.
Deja una respuesta