Androulla Vassilliou, comisaria europea de Cultura, Medios de Comunicación, Educación, Juventud y Deporte, y los 22 ministros de la Unión Europea, han aprobado una declaración conjunta en la que establece un Decálogo para la Europa de la Cultura.
Como dice Cécile Mazin, a través de quien me entero de la noticia, es una simple declaración de principios, poco efectiva, pero bonita.
Decálogo para la Europa de la Cultura
1. La Europa de la cultura encarna los valores de la democracia en todas las naciones de la Unión Europea.
2. La Europa de la cultura contribuye a la afirmación de la identidad europea en toda su diversidad y del desarrollo de las artes y los idiomas que constituyen su riqueza.
3. La Europa de la cultura garantiza la absoluta libertad de creación a través de todos sus componentes y sus manifestaciones.
4. La Europa de la cultura promueve el acceso de todos y cada uno sin distinción de sexo, edad, origen, estado de salud o condición social, a las obras intelectuales, las expresiones de arte, el legado del patrimonio tangible e intangible.
5. La Europa de la cultura preserva los derechos legítimos de los creadores y autores a una indemnización justa y los garantiza mediante todas las medidas apropiadas contra las amenazas de la piratería, la falsificación, el robo y el abuso a los que pueden estar expuestos.
6. La Europa de la cultura promueve la circulación y la exhibición de las obras, tanto en la Unión Europea como más allá de sus fronteras, y velará por el cumplimiento de las acciones legales y económicas de los diferentes actores culturales que las organizan y les dan valor.
7. La Europa de la cultura y establece las normas de buen gobierno de la economía de mercado de las industrias artísticas y culturales con un espíritu de total transparencia. Está implicada en el desarrollo de innovaciones de interés para las iniciativas gubernamentales y privadas que aseguren su desarrollo armonioso, al margen de cualquier monopolio comercial.
8. La cultura europea afronta los desafíos tecnológicos, económicos y jurídicos, derivados de la revolución digital para la recopilación y transmisión de obras así como para la difusión de nuevas formas de expresión artística.
9. La Europa de la cultura llama al fortalecimiento de los planes de estudio, métodos de enseñanza y programas para la educación artística y la formación de los diseñadores.
10. La Europa de la cultura, haciendo hincapié en que la creación, el arte y la belleza son una inversión fundamental en el futuro, tanto para el bienestar creativo íntimo y colectivo como económico, conmina a la UE a consolidar presupuestos para los programas de cultura y medios para satisfacer las necesidades y expectativas de los europeos.
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