Un juez federal norteamericano ha dado (18/11/2008) el primer visto bueno judicial al acuerdo del 28 de octubre realizado entre la Association of American Publishers (Asociación de Editores Estadounidenses), Authors Guild ( la Asociación Estadounidense de Autores) y Google. El acuerdo del 28 de octubre ponía fin a un litigio a raíz de las demandas interpuestas contra Google por la Asociación de Autores y cinco grandes editoriales estadounidenses (The McGraw-Hill Companies, Inc., Pearson Education, Inc., Penguin Group -USA- Inc., John Wiley & Sons, Inc. y Simon &Schuster, Inc.), en septiembre y en octubre de 2005, respectivamente. La demanda objetaba el plan de digitalización de Google, por lo que hace con la búsqueda y visualización de fragmentos de libros con licencias de derechos de autor provenientes de archivos digitales de bibliotecas, sin que se haya obtenido previamente el permiso explícito del propietario de los derechos de autor. El servicio de búsqueda de libros de Google da acceso a tres tipos de obras publicadas: las obras de dominio público, las obras con copyright y de las que se venden ejemplares y las obras con copyright pero que no se reinprimen, que son la mayoría.
Google, que ha aceptado pagar 125 millones de dólares en total, destinará un mínimo de 45 millones de dólares a los autores y a los editores de las obras sujetas a derechos de autor que hayan sido digitalizadas sin permiso. En este caso, el propietario tendrá derecho a una pequeña parte, al menos 60$, y también recibirá una parte de las ganacias que se generen a partir de las suscripciones institucionales hechas para acceder al servicio de búsqueda de libros de Google, así como también de las ventas en línea que se puedan producir a partir de estas consultas por parte de los usuarios.
Según el acuerdo, Google podrá mostrar gratuitamente hasta el 20% de la totalidad del texto y hacer disponible la totalidad de la obra si se paga una tarifa. Google se llevará el 37% de los ingresos resultantes, y el 63% restante será para los autores y los editores. En caso de que se obtengan ingresos por publicidad de Google, se repartirán en la misma proporción. De esta manera los autores podrán obtener ingresos de obras que sus editores no hayan reimprimido.
Google también destinara 34,5 millones de dólares a la creación y puesta en marcha de Books Rights Register (Registro de Derechos de Libros), una organización independiente sin ánimo de lucro, que tendrá el objetivo de localizar y registrar los titulares de los derechos de autor y garantizar que reciben los beneficios correspondientes según estableceel acuerdo (o sea, las ganacias generadas por las suscripciones institucionales, por la venta de libros, por ganacias de publicidad, etc.). Este registro controlado por un consejo de autores y editores, también servirá para que los autores puedan solicitar la inclusión o la exclusión del programa de búsqueda de libros de Google.
Según los términos del acuerdo, los usuarios pueden buscar y visualizar millones de títulos, incluidos los títulos agotados. También podrán comprar libros en línea a través del sitio web Book Search de Google. Las instituciones académicas de los Estados Unidos podrán suscribirse a las colecciones de bibliotecas de todo el mundo, y los estudiantes podrán acceder a los fondos digitalizados de los libros agotados desde los ordenadores situados en las bibliotecas públicas y universitarias.
La aprovación final por parte del tribunal está fijada para el próximo mes de junio, y en estos momentos los abogados están preparando las notificiaciones a los editores y autores para informarles sobre los detalles del acuerdo.
Con este acuerdo histórico los Estados Unidos se sitúan en la delantera para intentar establecer las bases de un nuevo modelo de negocio con los contenidos digitales. En Europa Google todavía no ha llegado a un acuerdo similiar con editores y autores. La Asociación de Libreros europeos ya ha formalizado su queja sobre este acuerdo, ya que temen la compentencia que les pueda hacer Google como distribuidor de libros en línea.
L’acord històric entre Google, els autors i els editors nord-americans obté el primer vist-i-plau judicial
Iolanda Bethencourt
[…] Estas compensaciones se derivan del acuerdo suscrito en octubre pasado entre Google, una asociaciñon de escritores de los Estados Unidos, y un grupo de editoriales de este estado, como consecuencia de las demandas que estos titulares de derechos interpusieron contra la empresa norteamericana. En este acuerdo, todavía pendiente de aprobación judicial definitiva, Google se comprometió a abonar una indemnización a los titulares de derechos de las obras que hubiera escaneado sin autorización previa, independientemente de su nacionalidad. Para más información sobre este acuerdo entre Google y los autores y los editores norteamericanos podéis consultar este artículo de BEAT Internacional. […]