A propósito de la entrega del Premio Nobel, la semana pasada el secretario de la Academia Sueca afirmó que ‘los Estados Unidos están demasiado aislados. No traducen lo suficiente ni participan en el gran diálogo de las literaturas. Esta ignorancia los restringe’.
Según el diario Le Monde, de las obras literarias que se publican en los Estados Unidos sólo el 3 % son traducciones. Sobre todo teniendo en cuenta que según la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE) el 28,02 % de los libros que publica la industria editorial española son traducidos de otros idiomas, este hecho nos hace plantearnos varias preguntas:
¿Qué interés suscita la literatura extranjera entre los lectores estadounidenses? ¿El hecho de que en los Estados Unidos se escriba tanta y tan diversa buena literatura es una razón de peso para que las apuestas de los editores estadounidenses por las obras escritas en otras lenguas sea tan tímida? ¿Cómo reaccionarían los lectores estadounidenses si los editores de su país atendieran mejor la literatura escrita en lenguas distintas del inglés?
En su informe «Comparative Literature», Jascha Hoffman de The New York Review of Books nos presenta las siguientes cifras con respecto a la traducción en Estados Unidos y a su peso relativo frente a lo que se traduce en algunos otros países.
[…] tanto, según el informe de Hoffman —al que ya nos referimos en la entrada “¿Por qué en los Estados Unidos se traduce tan poco?”— el 25 % de los libros publicados en España en 2004 fueron traducciones. En otros países el […]