¿Os ha pasado alguna vez que alguien dice o hace antes que vosotros algo que estabais pensando desde hacía tiempo? Seguramente alguna vez os habéis comprado la chaqueta o los zapatos de vuestros sueños y al llegar a la parada del autobús habéis encontrado a otra persona que también lo ha hecho —es probable que al cabo de un par de días ya sean varias—.
Pues si os ha pasado alguna de estas cosas, no es tan grave. Hay editores a los que les ha pasado algo parecido con los libros a los que les han echado el ojo y por los que han apostado.
Desde hace unos meses la periodista Eva Orúe viene desarrollando en su espacio sobre el mundo editorial del semanario digital Divertinajes.com la curiosa sección «¡Ese libro era mío!», en la que distintos editores hablan sobre libros que quisieron pero no pudieron editar por alguna razón.
Las siguientes son las entregas hechas hasta el momento por Eva en la sección «¡Ese libro era mío!»:
– El maestro Chaves Nogales, que estaba allí (31-08-2008). Por Carola Moreno, editora de Barataria. Chaves Nogales es un lujo que hubiera querido servir yo misma en bandeja Barataria pero que está disponible gracias a Libros del Asteroide.
– Editaría islas (14-09-2008). Por Irene Antón, editora de Errata Naturae. Después de vivir casi un año en Martinica, las islas me interesan no sólo como lugar, sino también como metáfora.
– Un plan desbarata(ria)do (28-09-2008). Por Luis Solano, editor de Libros del Asteroide. Cuando estaba trabajando en la puesta en marcha de la editorial, di con un libro que me encantó: Una questione privata.
– La elegancia y la edición (12-10-2008). Por Viviana Paletta, editora de Veintisiete Letras. Siempre soñe con recuperar ciertas figuras argentinas que deseaba hacer llegar a todos los buenos lectores. Había, por ejemplo, un vizconde…
– Books, Shakespeare and Company. El caso Sylvia Beach (26-10-2008). Por Fco. Javier Jiménez, editor de la colección Voces/ Ensayo de Páginas de Espuma.
– Lloré de rabia, lo juro (09-11-2008). Por Blas Parra, editor de El Nadir. No puedo dar nombres porque causaría una gran pena a una dama nonagenaria que quizá aún viva… a sus hijos, los de la dama, debiera partirles un rayo.
Historias del mundo editorial hasta ahora poco conocidas y tal vez ventiladas sólo en desayunos, sobremesas de comidas y cócteles del mundillo. Seguro que vosotros debéis conocer algunas más…
Hoy he visto a Eva Orúe en CNN+ y me ha impresionado muy positivamente su intervención, por lo positiva, constructiva, bien cimentada y argumentada… ¡Enhorabuena!