Vía TechCrunch nos enteramos que Amazon ha confirmado estar trabajando en una versión de su lector de libros electrónicos, Amazon Kindle, para ser utilizando en escuelas y universidades. Nos resulta imposible dejar de comentar una noticia tan interesante y de la que ya se ha hecho eco en El País y en el blog de Enrique Dans. La entrada del Kindle a las aulas educativas no sólo implicaría movimientos en el mercado editorial del libro de texto, sino un cambio fundamental en la modernización del modo de enseñanza.
Según el chivatazo dado por el analista de McAdams Wrigth Ragen, Tim Bueneman, y recogido por Andrea James, blogguer del Seattle Post-Intelligencer, la versión Kindle para las escuelas tendría una pantalla más amplia y optimizaciones en los controles operativos del interfaz. El mercado del libro de texto mueve más de 3.732 de euros en EE UU. y en España representa 736 millones de euros (cifra de 2006). Sin duda es un mercado que no podía escapársele a los creadores del iPod de los libros, nombre con el que Jeff Bezos, CEO de Amazon, bautizó al Kindle cuando fue presentado en sociedad en noviembre del 2007 y que ha sido repetido en los medios dada la supremacía del lector electrónico de Amazon sobre su más cercano competidor, el Sony Reader.
En la actualidad los usuarios del Kindle tienen disponibles a través de Amazon Kindle Store 145,000 títulos de ficción y no-ficción. Pensemos en las grandes editoriales especializadas en libros de texto como McGraw-Hill o Santillana, y en los acuerdos de cesión de contenidos digitales que la entrada del Kindle en el sistema educativo americano implicaría (Santillana está posicionada desde hace años en la venta de libros de texto en español para el mercado americano). Eso, sin mencionar cómo se transformaría la educación en el aula si los alumnos pudiesen acceder a los contenidos de todas sus materias en menos de 300 gramos de peso, además de tener la posibilidad de navegar en Internet, compartir apuntes y realizar consultas en tiempo real.
Si nos proyectamos unos cuantos años en el futuro -y a riesgo de sonar a relato de ciencia-ficción- quizá no sea tan lejano pensar en planes nacionales de alfabetización y fomento de la lectura que tengan como soporte principal a lectores de libros electrónicos como el Amazon Kindle.
¿Vosotros qué opináis?
[…] Vale la pena destacar que debido a las características de sus contenidos y al uso que se hace de éstos el del libro de texto es, además, uno de los sectores propicios para el desarrollo exitoso de iniciativas en el campo de la edición en soporte digital y en los que se le puede sacar un mayor provecho a la oportunidad que esta evolución representa. Con respecto al libro de texto y a la edición en soporte digital ya nos habíamos referido hace unos días a la intención de Amazon de colocar el lector Kindle en las escuelas. […]